Renata Zarazúa se despidió del WTA 1000 de Montreal, Canadá, con una derrota en segunda ronda ante la top 50 letona Jelena Ostapenko, quien tras un concierto de errores salió a devorar a la mexicana en el tercer set para concretar un 6-2, 4-6 y 6-2 en su favor tras una hora y 53 minutos de partido.
Zarazúa no era favorita en el papel, pero en el juego de este miércoles aprovechó todos esos resquicios que le abrió Ostapenko, campeona de Roland Garros en 2017 y actual 26 del mundo, para forzar a una tercera manga.
La europea cometió un total de 12 dobles faltas y lanzó un grito de desesperación poco antes de ceder el segundo set. Mientras Renata aprovechaba el descanso para ir a vestidores, Jelena fue a su esquina a tener una larga conversación con su coach, cuyos resultados se vieron en cuanto las acciones fueron reanudadas.
Zarazúa seguramente se irá con buenas sensaciones a pesar de la derrota, porque en estos dos partidos en Montreal que marcaron su regreso a canchas duras lució segura y con confianza en sus movimientos, lo cual se reflejó en saques, devoluciones y desplazamientos mucho más sólidos.
Es decir, no fue la jugadora de marzo pasado, adolorida y sumisa por su entonces reciente lesión en la rodilla izquierda. Ahora parece con la recuperación y convicción necesarias para encarar de mejor modo los últimos cuatro meses de competencia en 2025, que incluyen en lo inmediato el WTA 1000 de Cincinnati y el US Open.
En tanto, en las canchas canadienses estará otra mexicana en contienda, Giuliana Olmos. Gugu volverá a hacer pareja con su querida amiga Desirae Krawczyk.
Sus oponentes de primera ronda son la australiana Maya Joint y la estadunidense Caty McNally
