Renata Zarazúa se dijo contenta por la semana que vivió en la capital española, no sólo porque significó su regreso a las canchas después de un mes inactiva por una lesión en la rodilla izquierda, sino por llegar a la final en el inicio de la temporada de arcilla con miras a los WTA 1000 de Madrid, de Roma y a Roland Garros.
La singlista uno de México fue superada 3-6 y 4-6 por la egipcia Mayar Sherif en la final, de una hora y 46 minutos, del IV Open Internacional de Tenis Villa de Madrid, competencia internacional W100 del circuito de la ITF.
“Ella (Sherif) es una jugadora muy difícil, es muy incómodo jugar contra ella y me costó adaptarme hoy. Pero estoy súper contenta con la semana que tuve aquí.
“Estoy muy satisfecha con mi juego y con los partidos que he ganado. Pasé muchas emociones desde que llegué aquí, porque fue mi primer torneo después de un tiempo y significó muchísimo”, dijo Renata en este Domingo de Resurrección.
Zarazúa, singlista uno de México, disputó así su primera final en el año y mejoró tres posiciones en la clasificación mundial de la WTA, donde comenzó la semana en el puesto 70. Mayar Sherif dio inicio a la semana en el lugar 61 y la termina como la 50 mundial.